Proceso contra Galileo

Primera publicación del texto de
Copérnico en 1543 

Al hablar de paradigmas científicos no sólo hay que entender que se produce un cambio en las teorías científicas. Un cambio de paradigma suele implicar un cambio mayor, porque hay otra serie de elementos (tradiciones culturales, valores vigentes en una sociedad, etc) que también intervienen. En el caso de la conocida como Revolución Científica (paso del geocentrismo al sistema heliocéntrico) llevó varios siglos, desde que comienza en el siglo XVI con la publicación del De revolutionibus orbium coelestium de Nicolas Copérnico,  hasta finales del  XVII,  con la teoría de la Gravitación universal de Newton. Sin olvidar que entre uno y otro Kepler y Galileo han estado trabajando para el nuevo paradigma que realmente se  consolida después, a lo largo en el XVIII y en parte en el XIX

Un ejemplo de la importancia de esos otros factores que intervienen el el Proceso contra Galileo Galilei

Texto bíblico que se toma como verdad científica y es causa de problemas para los defensores del heliocentrismo 

Entonces Josué se dirigió a Yahvé, el día que Yahvé entregó al Amorita a los israelitas. Josué gritó:

“¡Sol, párate sobre Gabaón y tú, Luna, sobre el valle de Ayalón!”

Y el Sol se paró y la Luna quedo inmóvil hasta que el pueblo se vengó de sus enemigos. ¿No está escrito en el Libro del Justo? El Sol se quedó inmóvil en medio del cielo y retrasó casi un día entero su puesta.

                                                                            Josué: 10, 12-14

   Además de sus aportaciones científicas Galileo es recordado por su enfrentamiento con la Iglesia. El 1616 el Santo Oficio condenó la difusión y la lectura de la obra de Copérnico y más tarde, tuvo lugar el proceso contra Galileo. El  proceso acaba en 1633 y Galileo es obligado a abjurar del heliocentrismo y condenado a prisión.

Parte de la formula abjuratoria 

 “He sido juzgado como sospechoso de herejía por cuanto que he sostenido que el Sol permanece inmóvil y es el centro del universo y que la Tierra es móvil y no es el centro; deseo apartar de la mente de vuestras eminencias y de todo católico cristiano esta vehemente sospecha justamente a mí atribuida; por eso con corazón sincero y fe cierta, abjuro, maldigo y detesto los errores y herejías mencionadas..”

Se conmutó la pena de prisión pero Galileo no pudo volver a dar clases, hablar en público o investigar nada que fuera  relativo a los astros o al sistema heliocéntrico.